Lo prometido es deuda. Nos contaron que habría segunda parte y aquí está.
Como tanto Isidro, como la mayor parte de las autoridades, hablaban en castellano, este vídeo sí habilita subtítulos. Pero la gracia está en ver qué sale cuando habla el presentador en su lengua.
Por cierto. Esto también sirve pa comprobar una cosa perfectamente: Que sin la música, la música festera, las fiestas no son lo mismo. No vale poner cualquier cosa, palomicas mías.
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