sábado, 22 de diciembre de 2012

Felicidades Villeneros... Hemos sobrevivido.

Ya es 22 de diciembre y... sí señores, al parecer hemos sobrevivido a "La Fin del Mundo"... otra vez. No sabemos ná del resto del mundanal mundo, pero aquí no ha pasao ná, de ná, de ná.

Seguimos aquí pa ver un nuevo amanecer...
(qué poéticos que estamos)

Existen diversas teorías acerca del asunto (de cómo pijorra seguimos aquí), pero en El Orejón tenemos razones de peso para sospechar de un inesperado "salvador". 

Según la hipótesis más aceptada se cree que el exceso de "la mala olor" de nuestros queridísimo y aromático vertedero y planta de residuos ha podido crear una especie de cúpula de esas partículas que tanto nos "alegran" las fosas nasales. Esta cúpula protectora se dice que puede ser tan densa que permita desintegrar cualquier meteorito que intente descalabrarse contra nosotros, absorbe las ondas expansivas de las explosiones más fuertes, reduce los terremotos (aún no sabemos cómo) y nos protege de cualquier catástrofe nuclear, petada de Cofrentes incluida. 

Escudo anti-catátrofes "de narices".

Eso sí, podemos asegurar que en ningún momento hubo tormenta solar peligrosa, de otra forma el paseo Chapí hubiera desaparecido del mapa (tras su pérdida de masa forestal y sombril).


PD: Ah, por cierto... viene al pelo:


No hay comentarios:

Publicar un comentario