Otra piececica más

Esto es un no parar, durante los trabajos de excavaciones de la campaña de este año, en el Cabezo Redondo han descubierto otro brazalete de oro, una pieza más que añadir a los ya conocidos del Tesorillo del Cabezo Redondo y del Tesoro de Villena.

Lo más importante del asunto es que ha sido descubierto entre capas de cereales carbonizados. Ya, pero ¿qué tiene que ver los cereales con el oro?, pues mucho. A diferencia del preciado metal, los cereales (y más si están carbonizados) están compuestos de una base de carbono, como materia orgánica que es.

Haciendo uso de la técnica radiométrica de la descomposición del isótopo carbono 14 podemos estimar la edad de la muestra con cierta precisión. ¿Te suena a chino? No te preocupes, ya trataremos esto con más cuidado algún día en la sección que le corresponde (Botijo´s Science). 

El caso es que como estaba entre esas capas, se puede estimar entre qué periodos fue usado. Esto nos aportaría información de gran valor para entender el Tesorillo y el Tesoro.

Junto a él también ha aparecido un collar de bronce y adornos de oro y un colgante de piedra.

Con tantos hallazgos de tesoros no es extraño que seamos el pueblo con mayor densidad de piratas por metro cuadrado.

El descubrimiento se ha tratado de mantener en secreto durante las Jornadas de Puertas Abiertas para evitar posibles expolios, pero la UA se ha emocionado con eso de descubrir algo y no tardó en ser filtrada la noticia a la agencia EFE y a Eurpoa Press.

Esta historia suena a la de los dos hallazgos (del Tesoro y Tesorillo), que comenzaron cada una con el descubrimiento de un brazalete para luego acabar descubriendo el jugoso tesorico.

Parece que en Villena, piques donde piques, te encuentras oro.

¡Noun! ¡Rejoler! Pues no va y me sale el quinto tesoro del día.